10 consejos para un futuro más saludable con diabetes tipo 2

Cuando a las personas se les diagnostica diabetes tipo 2, lo más común es preocuparse de que junto con ella vengan muchos problemas de salud. Afortunadamente, la realidad nos muestra que se puede tener esta enfermedad y aún mantenerse saludable.

Si bien la diabetes es una enfermedad crónica, existen muchos cambios en el estilo de vida que puedes hacer para controlar mejor la afección y prevenir o retrasar las complicaciones.

Cambiar los hábitos de estilo de vida puede ser difícil, pero hacer cosas como llevar una dieta balanceada, hacer ejercicio, controlar el nivel de azúcar en la sangre y dormir lo suficiente puede realmente marcar la diferencia.

Para un futuro más saludable con la diabetes tipo 2, prueba a poner las siguientes recomendaciones en práctica.

Diabetes tipo 2: 10 cosas que puede hacer hoy para un futuro más sano

1.- Camina de 10 a 20 minutos después de comer.

Caminar después de comer puede disminuir el azúcar en la sangre post-prandial y ayudar con el control de peso.

No tiene que ser una caminata larga. De 10 a 20 minutos de movimiento moderado pueden ayudar a bajar el nivel de azúcar en la sangre cuando realizas la actividad después de una comida.

Según algunos estudios, parece que dar un paseo de 10 minutos justo después de las comidas, puede ser incluso más efectivo para mantener los niveles de azúcar en sangre equilibrados que dar un solo paseo de 30 minutos en otro momento del día.

2.- Haz ejercicios de fuerza con elementos que tengas en tu casa.

El entrenamiento de fuerza es un tipo de ejercicio que puede hacer que tu cuerpo sea más sensible a la insulina y ayudar a reducir el azúcar en la sangre, por lo que debe formar parte de la rutina de ejercicios de todos.

Para hacerlo no es necesario utilizar máquinas de pesas de lujo en un gimnasio o incluso las mismas pesas. Haz uso de tu imaginación y trata de levantar pesos que tengas en tu casa.

Por ejemplo: puedes levantar productos enlatados o botellas de agua o poner dos o tres libros en dos bolsas diferentes y hacer levantamientos con ellos.

También es recomendable que hagas ejercicios de calistenia como flexiones, abdominales y sentadillas. Si no has hecho ejercicio por un tiempo (o si ya eres adulto mayor), se sugiere empezar poco a poco hasta que te sientas mejor.

Puedes ver más en este artículo: Plan de ejercicios para diabéticos

3.- No le temas el medidor de azúcar en la sangre: Úsalo.

Los medidores de azúcar en sangre miden y te muestran la cantidad de azúcar en la sangre, no les tengas miedo.

Es muy común que personas recién diagnosticadas con diabetes tipo 2 no quieran ni tocar uno. Sienten que es un castigo si tienen que usarlo.

Lo que debes de entender es que el medidor de azúcar en la sangre es una herramienta que debe usarse para estar mejor informado y tomar mejores decisiones. En resumen te da más control sobre tu azúcar en la sangre, y más poder sobre tu salud.

4.- Haz una cita para las diferentes pruebas y chequeos que son importantes para la diabetes tipo 2.

Las personas con diabetes tienen un riesgo elevado de padecer distintas complicaciones, por lo que es importante que realices todas las pruebas que necesites para conocer el estado de tu salud.

Muchas veces, cuando las personas son diagnosticadas recientemente con diabetes, no han visto a un médico durante algún tiempo.

Se afligen con el reciente diagnostico pero creen que todo lo demás está bien, lo que hace que con demasiada frecuencia se pasen por alto estas pruebas importantes.

Muchas complicaciones de la diabetes tipo 2 se pueden prevenir si se descubren temprano con una de estas pruebas de rutina. Así que si aún no has programado exámenes y chequeos, es el momento de hacerlo.

Te sugerimos leer este artículo: Pruebas y chequeos importantes para la diabetes tipo 2

5.- Verifica las etiquetas de los alimentos en busca de carbohidratos, no solo busques azúcar.

Las etiquetas de nutrición contienen mucha información útil para las personas con diabetes tipo 2, pero solo si aprendes a interpretar la etiqueta.

No es solo el azúcar lo que afecta los niveles de glucosa en la sangre, también tenemos que prestar mucha atención a los carbohidratos.

Por ejemplo, en el frente de un paquete puede indicar que un alimento no contiene azúcar, pero cuando verificas en la parte posterior la cantidad de carbohidratos totales, podría ser una historia totalmente diferente.

Por eso es importante mirar todas las piezas: el azúcar, el carbohidrato, la fibra. Claro que aprender a analizar cómo funcionan estas piezas juntas lleva tiempo.

Sin embargo, la conclusión que tienes que aprender hoy es: solo porque un paquete dice que un alimento no contiene azúcar no significa que puedas comer tanto como desees.

6.- Evita comidas que contengan solo un grupo de alimentos.

Es muy recomendable que comas al menos tres grupos de alimentos en cada comida. Esto ayuda a mantener el azúcar en la sangre más controlada durante todo el día.

Por ejemplo, en lugar de solo un tazón de avena, toma una tasa de avena con un puñado de nueces y una fruta. En lugar de comer dos tostadas, puedes tomar una tostada, un huevo cocido y un plátano.

Vas entendiendo, son tres grupos de alimentos distintos, en lugar de simplemente avena (1 alimento) o solo dos tostadas (otro alimento), aquí nos faltaría un grupo de alimentos. Esto tiene que ayudarte a pensar más allá 2 combinaciones.

Otro ejemplo: Si deseas tener una galleta u otro dulce para el postre (1 alimento), puedes consumir en tu plato principal solo proteínas y verduras, como pechuga de pollo (1 alimento) y espinacas (1 alimento). Al final consumimos 3 alimentos de grupos distintos.

Esta variedad te va a ayudar en un inicio a controlar de mejor manera tu azúcar en la sangre diariamente.

Claro que debes también tomar en cuenta el tamaño de la porción. En temas de alimentación para diabéticos siempre es recomendable acudir con el nutricionista.

7.- Prueba una proteína que no sea animal.

Cuando la mayoría de personas piensan en proteínas, lo que les viene a la mente es carne de res, pollo, y tal vez cerdo, ternera o pavo.

Pero hay muchas otras proteínas que hacen deliciosas opciones para una dieta para la diabetes. No siempre necesitamos tener una proteína de un animal.

Puedes probar con diferentes fuentes de proteínas magras como: pescado y mariscos, frijoles y legumbres, y alimentos a base de soya.

El queso y los huevos también son proteínas, aunque es posible que desees considerar la reducción de quesos grasos y claras de huevo, dependiendo de tus necesidades dietéticas.

Te sugerimos leer esto: La diabetes y lo importante que es contar con un nutricionista o dietista registrado

8.- Mantén una buena higiene bucal diaria.

Las personas con diabetes corren el riesgo de sufrir de enfermedad periodontal, y el riesgo es mayor si la diabetes está mal controlada. También hay estudios que relacionan la enfermedad periodontal y la enfermedad cardiovascular.

Dado que las personas con diabetes ya tienen un mayor riesgo de enfermedad periodontal y enfermedad cardiovascular, es particularmente importante practicar una buena higiene oral, además también te ayudara a evitar el mal aliento.

Debes cepillarte al menos dos veces al día durante un mínimo de tres minutos con una buena pasta dental con flúor y usar hilo dental por lo menos una vez al día.

9.- Duerme bien y lo suficiente.

Cada vez son más los estudios que muestran los efectos perjudiciales del no dormir bien en las personas con diabetes. Por lo tanto es aconsejable que hagas lo posible por tener un sueño de calidad. Piensa en ir a dormirte unos 30 minutos antes o más de ser necesario.

Además, según algunos expertos el dormir bien, también aumenta las probabilidades de mantener buenos niveles de azúcar en la sangre. Te sugerimos leer: Relación entre la diabetes y el dormir bien o no

10.- Siempre mantén una actitud positiva.

Cuando se trata del manejo de la diabetes, las personas pueden ser realmente duras consigo mismas. Generalmente los diabéticos se fijan en lo que hacen mal y no prestan atención a todo lo que pudieron hacer bien.

Así que anímate y reemplaza los pensamientos negativos por positivos y deja de pensar en términos de lo bueno y malo. En cambio, puedes pensar en lo útil que puede ser o no, para ayudar a controlar tus niveles de azúcar en la sangre.

Mantener una actitud y un pensamiento positivo va a conducirte a ser perseverante y lograr tus distintas metas para el control de la diabetes. Por el contrario una actitud negativa te hace pensar que todo lo que haces está mal, y esto te hace querer renunciar a tus objetivos.

Aunque tengas diabetes, con un buen control del azúcar en la sangre puedes tener un futuro saludable. Muchos diabéticos tipo 2 han llegado a 60 o más años sin mostrar ninguna complicación grave.

Hay muchas cosas que puedes hacer, esperamos que todos los anteriores consejos sean un buen punto de partida.